Desde la antigüedad hasta hoy los faros no sólo han guiado a los navegantes en sus travesías sino que a la vez son protagonistas de numerosas historias.
En nuestro país se contabilizan más de 60 de estas estructuras distribuidas en la costa atlántica, que fueron construidas en distintas épocas.
De todos ellas, vale la pena detenerse en cinco opciones que pueden encontrarse en territorio bonaerense:

Faro Punta Mogotes
Declarado Monumento Histórico Nacional, el faro Punta Mogotes se encuentra ubicado a unos 8 kilómetros al sur del cabo Corrientes, en la ciudad de Mar del Plata. Librado al servicio el 5 de agosto de 1891, su figura de 35 metros de altura en franjas blancas y rojas corresponde a la clásica representación que se tiene de este tipo de construcción.
La estructura de chapas de hierro, ensambladas con remaches y apoyadas en una firme base de mampostería, posee en su interior una escalera con 154 escalones que llegan hasta la cima. Antiguamente tenía un semáforo marítimo y un cañón que disparaba un arpón con sogas para rescatar a navegantes encallados. Hoy innecesarios, estos elementos son parte del museo que acompaña al faro.

Faro Punta Médanos
Ubicado en el partido de La Costa, en el kilómetro 364,5 de la Ruta Provincial 11 y entre las localidades de Mar de Ajó y Pinamar, está rodeado de grandes dunas de arena y es factible ver su luz durante una caminata nocturna por la playa.
El faro consiste en una torre metálica troncopiramidal que cuenta con una garita a franjas horizontales rojas y blancas. Empezó a funcionar en 1893, tiene una altura de 59 metros y en la actualidad se encuentra cerrado al público para su ascenso.

Faro Querandí
Está situado a unos 400 metros del mar, en medio de un bosque de pinos y acacias rodeado de médanos y dunas. Fue inaugurado el 27 de octubre de 1922 y representó la primera construcción de lo que después sería el partido de Villa Gesell.
Tiene una escalera caracol con 276 escalones y se ubica a 30 kilómetros al sur del centro de Villa Gesell, en la Reserva Natural Municipal Faro Querandí.

Faro Claromecó
Al igual que el faro Querandí tiene 54 metros de altura, por lo que están entre las estructuras cerradas más altas de Sudamérica. Se construyó para evitar que los buques se acercaran a los bancos de arena típicos de la zona y empezó a funcionar el 20 de octubre de 1922.
Esta torre con franjas negras y blancas y 278 escalones se ubica a 2 kilómetros del centro de Claromecó, cerca de la desembocadura del arroyo homónimo, en el partido de Tres Arroyos.

Faro Recalada
A unos 3 kilómetros al este de la zona céntrica del balneario de Monte Hermoso, por el camino costero que conduce a Sauce Grande, está emplazado este impactante faro de estructura abierta, compuesto por una torre de metal pintada con rayas rojas y blancas y una escalera circular de casi 300 escalones.
Fue inaugurado el 1 de enero de 1906, es uno de los más elevados y llamativos del continente, y actualmente no se puede ascender a él pero sí es factible visitar el predio que lo contiene.
Con sus 74 metros no sólo es el más alto de la Argentina sino el segundo de América después de la Cruz del Tercer Milenio, situada en Coquimbo, Chile.