Con la presencia de Alexandre Roig, presidente del Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES), se llevó a cabo el acto de presentación del Programa de Educación Cooperativa (PEC), que le posibilita al mencionado organismo la realización de encuentros con estudiantes para trabajar herramientas que les permitan desarrollar experiencias dentro de la economía social y el cooperativismo, un contenido establecido en la legislación educativa pero históricamente relegado.En esta primera etapa, el programa está destinado a jóvenes que estén cursando sus últimos años de la escuela secundaria y apunta, particularmente, a estudiantes de escuelas técnicas, quienes ya cuentan con materias de prácticas profesionales que posibilitan su trabajo con coope- rativas, mutuales y unidades productivas de la Economía Social Solidaria y Popular.Junto a Roig participaron de la presentación la coordinadora de Capacitación Cooperativa y Mutual del INAES, Erica Pereyra; Gerardo Berchi, director de Escuelas Agrarias de la provincia de Buenos Aires, y la directora del programa, Carina López Monja.“Venimos a ampliar derechos, que los jóvenes conozcan otra manera de organizarse y pensar su introducción en el mundo del trabajo”, explicó la coordinadora de Capacitación Cooperativa y Mutual. “Creemos que es fundamental que se interioricen en la economía social, que conozcan a la cooperativa como una posibilidad para poder trabajar y, en ese sentido, creemos que el programa es un gran aporte para avanzar en el conocimiento de este sector”, agregó Pereyra.Roig destacó esta nueva iniciativa y detalló que al comenzar la implementación “nos encontramos con una demanda mucho mayor de la que nos esperábamos, ya que hay una toma de conciencia y un agotamiento de la forma en que el sistema educativo propone a los jóvenes un imaginario que no corresponde a su experiencia”.En este sentido, el titular del INAES explicó que “para que el dispositivo pedagógico funcione, además de contenidos y materias tradicionales, necesitamos tres cosas: hacer, crear y anclar territorialmente la práctica. Es clave que la escuela se convierta en un espacio laboral, no solamente conectar educación y trabajo, sino que el espacio educativo sea también un espacio laboral y productivo”.La responsdable del programa López Monja destacó que mediante las pruebas piloto que comenzaron a realizarse en distintos establecimientos educativos “los estudiantes van a conocer distintas cooperativas, fábricas recuperadas y unidades productivas de la economía social y solidaria”.