Julieta Santamaría, una argentina de 27 años, recorrió más de 4.000 kilómetros en suelo brasileño para cumplimentar el Camino de la Mata Atlántica y concientizar acerca del cuidado medioambiental. Nadie hasta el momento había cubierto la totalidad de este extenso sendero que atraviesa 5 estados brasileños y más de 100 municipios.