La Cooperativa Obrera comenzó a dar sus primeros frutos el 1 de mayo de 1922, cuando se materializó la primera hornada de pan, el noble alimento que dio origen a la entidad. Por entonces, el precio de este producto esencial para la mesa hogareña tenía una gran incidencia en el presupuesto familiar de los trabajadores.

Un total de 42 personas prestan servicios en el nuevo local que la Cooperativa Obrera inaugura en el emblemático balneario de la costa atlántica, cuya construcción respeta los lineamientos urbanos que predominan en el lugar.

El pasado 16 de febrero se cumplió el centenario de la fundación de la Asociación de Cooperativas Rurales Zona Central, que diera pie a la conformación de la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), convertida en la actualidad en uno de los operadores de granos más grandes del país.

A partir de este mes, la Cooperativa Obrera toma posesión de siete sucursales que pertenecían a una histórica cadena supermercadista de Comodoro Rivadavia, llegando de tal manera a Chubut, la sexta provincia argentina en la que la empresa social de los consumidores está presente.

La Coope puso en marcha su nueva planta panificadora, dotada con todos los adelantos técnicos como para duplicar inicialmente el volumen de producción y con una amplia superficie, capaz de almacenar los diferentes procesos de producción que surjan de acuerdo con las necesidades de los asociados.