Resultado de la primera perforación termal de la Mesopotamia Argentina, realizada en 1994, las Termas de Federación representan uno de los más lugares de nuestro país más visitados por el turismo.
El complejo, que incluye un parque acuático, constituye una fuente importante de ingresos para la locali- dad entrerriana, en la que se pueden realizar salidas en kayaks, cabalgatas, city tours y avistajes de flora y fauna en la reserva forestal Chaviyú.
Asimismo, tanto en los arroyos como en el embalse Salto Grande puede llevarse a cabo la pesca deportiva de diversas especies, como dorado, amarillo, armado chancho y surubí pintado, entre otras.
En Termas de Federación fluyen, desde una profundidad de 1.268 metros, 450 mil litros de agua cristaina y caudalosa por hora, a una temperatura constante de 42,5º C, y con una presión de casi 6 kilogramos por centímetro cuadrado.
El lugar, ideal para el relax y el descanso, incluye un pulmón verde cuyas hectáreas forestadas y parquizadas han logrado una densidad de uso calculada en alrededor de 2 mil personas por día.
Los visitantes al complejo termal pueden disfrutar de piletas cubiertas y descubiertas, que cuentan con bancos sumergidos, lugares para cambiarse, duchas, asientos, percheros y quinchos.
La piscina semiolímpica, de 400 metros y profundidad ideal para poder nadar, posee generalmente 37º C de temperatura, que en la temporada estival se alivia con agua fría para hacer más placentero su uso.
Existen asimismo sectores específicos para niños, con profundidades menores a 70 centímetros, y para personas con movilidad reducida, con una rampa de ingreso y una escalera de 2,90 metros de ancho con baranda metálica en todo su recorrido.

Un bien dispuesto comedor, sanitarios/vestuarios, enfermería, seguridad e informes, completan el acondicionamiento del predio de Termas Federación, que incluye el sector terapéutico constituido por el placentero spa.